Entre el 4 y el 22 de julio, un equipo del Instituto de Investigaciones de la Amazonía Peruana (IIAP) recorrió la provincia de Condorcanqui, en Amazonas. Ello con el fin de estudiar los varillales de altura, ecosistemas amazónicos que crecen sobre suelos de arena blanca y que albergan una riqueza natural y cultural singular.
La investigación se desarrolló en territorios de las comunidades Alto Pupuntas, Alto Pajakus, Nuevo Seasmi y San José de Japaime, ubicados en el distrito de Nieva. El objetivo fue documentar la biodiversidad de estos bosques y reconocer las prácticas culturales del pueblo awajún y de pobladores mestizos que contribuyen a su conservación.
Hallazgos que sorprenden a la ciencia
Los resultados revelaron la presencia de especies únicas y, en varios casos, potencialmente nuevas para la ciencia. En herpetofauna, se registraron especies que habitan en charcos temporales, hojarasca y quebradas arenosas. Entre ellas dos posibles nuevos descubrimientos: Pristimantis sp. nov. y Chiasmocleis sp. nov.
-
Recomendados:
- Expedición científica halla especies únicas en varillales de Amazonas
- Fernando Olivera anuncia vigilancia y futura detención de Dina Boluarte si gana la presidencia
- Ley amnistía Perú genera protestas masivas frente Palacio Justicia
En peces, se identificaron especies endémicas y otras que podrían ser inéditas de los géneros Anablepsoides, Astroblepus, Dectobrycon y Odontostilbe. La expedición también reportó una alta diversidad de hongos comestibles, como Auricularia delicata, A. fuscosuccinea y Pleurotus djamor, con valor alimenticio y económico para las comunidades.

Mamíferos y murciélagos en ecosistemas frágiles
En la zona de Seasmi habitan 42 especies de mamíferos grandes. De ellas, 27 fueron registradas en los varillales, equivalentes al 64,3 % del total. Siete son raras, 16 aparecen con frecuencia y cuatro se observan de manera regular: el armadillo de cola desnuda (Cabassous unicinctus), el pichico de barba blanca (Leontocebus leucogenys), el shiwi (Tamandua tetradactyla) y el armadillo común (Dasypus novemcinctus).
La investigación también documentó 31 especies de murciélagos, mayormente frugívoros con un papel clave en la dispersión de semillas. Se estima que podrían existir hasta 45 especies en el área.
Los hallazgos confirman que los varillales y bosques de arena blanca son ecosistemas con alto valor ecológico, esenciales para la biodiversidad y el sustento de las comunidades locales. La expedición se llevó a cabo con el respaldo de autoridades comunales y el consentimiento informado de las poblaciones involucradas, reforzando la necesidad de proteger estos espacios frente a amenazas ambientales.
Lea la nota original aquí o visita el medio Inforegión