Un posible asesinato y consecuente suicido es la hipótesis que maneja la policía en el caso del abogado Lizandro Ordoñez, hallado muerto junto a su practicante en una oficina del Centro Comercial San Andrés.
Un desafortunado hallazgo sorprendió la mañana del pasado lunes a la ciudad del Cusco. Un abogado y una joven mujer yacían muertos en el interior de la oficina de un Centro de Conciliación.
Hallan dos cadáveres con impactos de bala en oficina de abogado en Cusco
-
Recomendados:
- Quellouno: Productora de tuberosas preserva 30 variedades de uncucha y solicita obras de riego y caminos
- El secreto del cacao chuncho blanco llega a Quillabamba con el éxito de Chocolates Yanary
- Intoxicación masiva de más de 250 estudiantes expone la dura realidad del Hospital Quillabamba
El varón identificado como Lizandro Ordóñez Villalba (52) y la fémina Flora Cano Laura (29). Ambos cuerpos presentaban heridas de bala y junto a sus cadáveres se halló un arma.
Tras el hallazgo peritos pertenecientes a la División de Investigación Criminal y de la Oficina Regional de Criminalística, realizaron una extensa jornada de casi 5 horas antes del levantamiento de cuerpos.
La policía no ha emitido ninguna información oficial hasta el momento. Sin embargo en declaraciones a la prensa, un oficial dio avances sobre la investigación.
«Aparentemente habría habido un homicidio y después un suicidio, estamos investigando», explicó.
Asimismo dijo que aparentemente solo dos personas habrían participado del desafortunado hecho: el abogado y su practicante. También dijo que se están haciendo las pruebas de absorción atómica en los cuerpos para determinar quien habría disparado el arma.
Por su parte los familiares de la joven fallecida, reclamaron celeridad en las investigaciones. La madre de la victima dijo que la ultima vez que supo de su hija fue el sábado por la noche.
«He llamado a mi hija a las 7 de la noche del sábado y me ha dicho que se iba a ir a dormir a mi otra casa que queda en el molino, luego el domingo su celular ya no contestaba estaba apagado», señaló.
Luego relató que inclusive habló con el abogado fallecido; su hija le paso el teléfono y Ordoñez le dijo que se quedarían trabajando hasta tarde y que no se preocupara.
El abogado, propietario del Centro de Conciliación había contratado como practicante a la joven, que estudiaba Derecho en la Universidad Alas Peruanas.
Además se supo que anteriormente, ya habían trabajado juntos en el distrito de Urcos, según el testimonio de la madre de la joven.