El plazo de 72 horas impuesto por pobladores para acelerar proyectos de remediación por contaminación venció sin respuesta del cuestionado gobernador Richard Hancco, quien exige cumplir procedimientos administrativos establecidos.
Hancco rechazó el ultimátum de dirigentes de la cuenca Ramis, argumentando que los pobladores conocen perfectamente los mecanismos de seguimiento de inversiones y deben acudir a las oficinas regionales a través de sus alcaldes.
«No es que acá yo te mando una carta y mañana se aprueba un expediente», declaró el gobernador regional, quien calificó como irrazonable la imposición de plazos perentorios para la aprobación de expedientes técnicos.
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La autoridad regional responderá oficialmente al ultimátum mediante informe detallado sobre el estado actual de los proyectos, instando a dirigentes y alcaldes a realizar seguimiento directo en dependencias gubernamentales, a pesar de grave situación en localidades afectadas por contaminación.
Hancco detalló que algunos expedientes están próximos a su aprobación, como el caso Potoni en Azángaro, mientras otros como Orurillo recién presentaron documentación requerida para evaluación correspondiente.
El gobernador recordó que la ley establece mecanismos de informe programados para mayo y septiembre de este año, rechazando que la sociedad civil se acostumbre a presionar autoridades mediante ultimátum o amenazas similares.
«Hay mecanismos de respeto entre sociedad civil y el gobernador de turno», enfatizó Hancco, quien se mostró dispuesto a reunirse con pobladores, pero bajo protocolos institucionales adecuados.
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