Los agricultores del sector Santa Bárbara fortalecen activamente la producción de truchas gracias al significativo impulso ofrecido por la pertinente Municipalidad de Santa Ana. Los productores de trucha del sector Huayanay robustecen sus actividades comerciales a través del continuo apoyo técnico y el suministro esencial de alevinos proporcionados por el gobierno local.
La productora piscícola Juana Cabrera, dueña de la reconocida piscigranja Señor de Qoilloriti, destacó que este apoyo específico recibido le ha permitido sostener su valioso emprendimiento rural. Señaló que ha trabajado continuamente durante dieciocho años en su proyecto piscícola, por lo tanto, el apoyo municipal es indispensable. La señora Cabrera contó específicamente que el soporte del municipio se concreta mediante la entrega de alevinos y la realización de capacitaciones técnicas.
La productora también señaló con énfasis que el financiamiento económico es absolutamente clave para garantizar la total sostenibilidad de las piscigranjas operativas. Esto también ayuda a fomentar el crecimiento integral del importante sector productivo en la región, asegurando un futuro próspero.
-
Recomendados:
- 7 de cada 10 peruanos rechaza el encierro de gallinas en jaulas, según encuesta de Ipsos
- Gerente de Salud y hermano de César Acuña involucrados en presuntas coimas de Frigo Inca
- ¡Cusco se unió al Reciclafest 2025!
Acotó que para que su trabajo en la piscicultura siga adelante, se requiere urgentemente apoyo con préstamos efectivos. Estos créditos son necesarios para poder crecer considerablemente y continuar proveyendo productos frescos al importante mercado local de la provincia. La productora resaltó finalmente la vital importancia de las inversiones de carácter público que fortalezcan sustancialmente las capacidades comerciales de los productores rurales.
Inversión es clave para el desarrollo rural y la sostenibilidad de la piscicultura en Quillabamba
Los productores rurales a menudo enfrentan grandes limitaciones logísticas para trasladar adecuadamente sus productos hasta la ciudad, por ello el apoyo es esencial. La señora Juana Cabrera, una líder en el sector, demuestra el valor de la perseverancia al mantener su piscigranja Señor de Qoilloriti durante casi dos décadas. El gobierno local de Santa Ana reconoce la gran labor de estos agricultores dedicados y por eso ofrece apoyo técnico profesional y suministra alevinos de alta calidad.
La búsqueda de préstamos por parte de los productores es crucial para poder aumentar la escala de producción y consolidar una cadena de suministro más eficiente. Este tipo de respaldo garantiza que el sector de la trucha pueda seguir siendo un motor para la economía de los centros poblados. La administración municipal tiene la oportunidad de generar un impacto duradero al facilitar las herramientas financieras y técnicas para el desarrollo. La piscicultura se posiciona como una actividad económica relevante que fortalece del desarrollo rural y merece la atención prioritaria de las autoridades competentes.


