La Asociación de Productores de Cacao Ecológico de Kimbiri (Aprocek) combina tradición y ciencia para conquistar nuevos mercados.
En el distrito de Kimbiri, en la provincia de La Convención, la producción de cacao ha encontrado un nuevo impulso gracias al trabajo de Yulma Ramírez Taboada, bióloga egresada de la Universidad Nacional de San Cristóbal de Huamanga. Junto a su madre y otros productores, Ramírez ha aplicado sus conocimientos científicos en microbiología para optimizar la fermentación del cacao, proceso clave para obtener sabores únicos con notas frutales y florales, sin dejar de lado la tradición familiar de cultivo.
El esfuerzo colectivo se canaliza a través de la Asociación de Productores de Cacao Ecológico de Kimbiri (Aprocek), que agrupa a agricultores locales e impulsa variedades reconocidas como el Chuncho y el Vraem 99. Para abrir nuevos mercados, la asociación lanzó su propia marca comercial, Aprochok, con la que busca posicionar chocolates y derivados con identidad local y valor agregado. Además, las capacitaciones del Instituto Nacional de Innovación Agraria (INIA) y el Servicio Nacional de Sanidad Agraria (Senasa) han permitido a los productores adoptar prácticas agrícolas más sostenibles, como el uso de abonos biológicos y controles naturales de plagas, eliminando pesticidas químicos.
Los avances obtenidos ya cuentan con reconocimiento internacional. En los International Chocolate Awards 2024, Aprochok obtuvo una medalla de plata por su pasta de cacao y una de bronce por su chocolate con arándanos al 60 %. En 2025, dos productores de Aprocek también fueron premiados en el Concurso Internacional de Chocolates Elaborados en el Origen (AVPA París): lograron una Medalla Gourmet por su chocolate con aguaymanto y una Medalla de Plata por sus nibs de cacao.