En los últimos cinco años, la exportación de jengibre, popularmente conocido como Kión, y de café, se ha duplicado y dinamiza la economía de la selva central, reportó el gerente del Instituto Peruano de Economía, Carlos Gallardo.
«La agroexportación de Junín ha llegado a su récord el año pasado (2023), con 235 millones de dólares. Eso es el doble lo que se reportó en el 2019», resaltó Gallardo en conversación con Huanca York Times. Ambos cultivos son los principales productos de la canasta exportadora de la región Junín.
Sin embargo, dijo el experto, que el reto hacia adelante es cómo los productores de café deben superar la regulación de los países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), de que desde el 1 de enero de 2025 todo el café debe provenir de zonas libres de deforestación, con el que busca adaptarse al cambio climático, evitando la pérdida de bosques y protegiendo la biodiversidad.
-
Recomendados:
- Ica: Mineros informales bloquean la Panamericana Sur e interrumpen el tránsito vehicular
- Día Mundial de la Pesca: Crisis de la pota y el trato desigual que enfrentan los pescadores artesanales del Perú
- Trujillo: vecinos ruegan retomar obra tras abandono de trabajos en buzones de la urb. Vista Hermosa
Este repunte de la agroexportación de la región Junín es parte de la recuperación de la agricultura en general de Junín, que da trabajo al 30 % de la Población Económicamente Activa (PEA) de Junín, pero el problema que afronta es la informalidad que afecta la calidad del empleo que genera.
La economía regional cayó -3% el 2023
Gallardo señaló que la economía de Junín en el 2023 cayó -3%, que es cinco veces más de la caída de la economía nacional, que fue de -0.6 %, causada por una menor producción de los sectores minería y construcción.
«Pero el agro mantuvo su crecimiento, impulsado principalmente por la agroexportación de paltas y café y jengibre», dijo Gallardo.
El proyecto Toromocho, ubicado en el distrito de Morococha, el segundo yacimiento más grande de cobre del Perú, es la principal actividad extractiva minera que dinamiza la economía regional, y ahora que ha retomado sus inversiones, «va a permitir aumentar la producción para inyectarle un dinamismo a la economía», dijo el experto.
Aunque hasta febrero, el sector minero mantenía su caída, en 8%.
Lo positivo sigue siendo el agro, cuyo crecimiento en el 2024 bordea el 9 %.
Lea la nota original aquí o visita el medio HYTIMES.PE