La producción de uva en el valle de Ica se encuentra amenazada por el intenso frío que ha afectado la región en este invierno de 2024. Según informó Agraria.pe, los productores no habían previsto un año tan frío, lo que está causando problemas en el crecimiento de las vides.
La variedad favorita de los productores, Allison, es especialmente vulnerable al frío durante su etapa de crecimiento. Conocida por su fertilidad y excelente rendimiento, la Allison no soporta bien las bajas temperaturas, lo que provoca corrimiento en la fruta. La Sweet Globe, la variedad de uva más plantada en la región, también está sufriendo los efectos del frío.
Elzabeth Miranda, gerente comercial de Agrobusiness International Peru y asesora de Vivero Los Viñedos, explicó que casi todas las variedades están experimentando corrimiento debido al frío. Las podas realizadas a fines de mayo están siendo afectadas por temperaturas que llegan a los seis grados, lo que plantea serios desafíos para los productores.
-
Recomendados:
- Ica: Mineros informales bloquean la Panamericana Sur e interrumpen el tránsito vehicular
- Día Mundial de la Pesca: Crisis de la pota y el trato desigual que enfrentan los pescadores artesanales del Perú
- Trujillo: vecinos ruegan retomar obra tras abandono de trabajos en buzones de la urb. Vista Hermosa
Para mitigar los efectos del frío, Miranda recomienda aumentar la dosis de citoquinina en yema verde y floración, y utilizar brasinoesteroides mezclados con cianamida de manera preventiva. La situación actual contrasta con el año pasado, cuando el problema principal era el exceso de radiación y temperatura.
Cómo afecta el frío la evolución de la vid
En diálogo con LA LUPA la ingeniera agrónoma e investigadora Anyela Vargas Arista señaló que el frío eleva los niveles de acidez de la uva y reduce los de azúcar, afectando la calidad del fruto. «Los climas fríos elevan los niveles de acidez de la uva a la vez que reducen los de azúcar, lo ideal es que no sean menores a los 13 grados, la vid necesita una acumulación de horas de frío entre 150 y 600 horas siendo vital para la calidad del fruto» explicó.
El frío registrado a inicios de este invierno podría afectar principalmente a las agroexportadoras de uva de mesa de la región, y más adelante, a los productores locales que están preparando el proceso de poda para agosto. Este descenso de temperatura podría alterar la fenología normal de la fruta.
Ica es la primera región exportadora de uva de mesa del Perú, seguida por las regiones del norte del país. La reducción de la producción debido al frío podría impactar negativamente en la campaña venidera, afectando tanto la cantidad como la calidad de la uva destinada a la exportación.
Además del impacto en las variedades Allison y Sweet Globe, las temperaturas frías también podrían repercutir en el calibre de las bayas, como ya está sucediendo con el arándano en podas tardías en el norte. La necesidad de asegurar el desarrollo adecuado de los racimos en condiciones frías se convierte en el principal desafío para los productores.
Lea la nota original aquí o visita el medio LA LUPA