El conflicto en Mollepata sigue sin resolverse tras la reunión entre los dirigentes de la comunidad y el gobernador regional de Ayacucho, Wilfredo Oscorima, en la sede central del Gobierno Regional de Ayacucho (GORE). Los pobladores, que habían dado plazo hasta hoy para que el gobernador respondiera a sus demandas, se mantienen firmes en su lucha luego de más de dos horas de diálogo que no llegaron a buen puerto.
Durante el encuentro, los dirigentes de Mollepata exigieron soluciones a problemas relacionados con proyectos de agua y saneamiento básico, la construcción del centro de salud, entre otros temas urgentes para la comunidad. Sin embargo, aunque Oscorima ofreció disculpas por el exabrupto que protagonizó en otra reunión con los pobladores (les gritó: «únanse, carajo»), se negó a firmar el acta de compromisos solicitada por los dirigentes.
La principal exigencia de los líderes comunales era que el gobernador acudiera a Mollepata para disculparse públicamente y formalizar los acuerdos. Según testigos, Oscorima habría respondido: «ustedes no me van a decir cuándo ir y cuándo no ir», lo que aumentó la frustración entre los pobladores. Además, aseguró que llegaría a este lugar en diciembre para poner «la primera piedra» de la construcción del centro de salud de Mollepata.
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Ante esta situación, la dirigencia interpretó la actitud del gobernador como una estrategia para eludir los compromisos, lo que consideran un acto de «patear el tablero». Por ello, han decidido convocar una reunión con las bases de Mollepata este fin de semana para definir las medidas de fuerza que tomarán en respuesta a la postura del gobernador, quien ya se encuentra en su tercer mandato al frente del GORE-Ayacucho.
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