Bloqueos de vías realizadas por mineros informales en el sur del Perú afectan el turismo y causan pérdidas en Cusco, Ica y Arequipa. Las cancelaciones golpearon con fuerza al turismo del sur peruano. Regiones como Cusco, Ica y Arequipa enfrentan un escenario económico crítico por los recientes bloqueos.
La Cámara Nacional de Turismo (Canatur) reportó que los visitantes anularon el 80 % de sus reservas en estas zonas. Carlos Loayza, gerente general de Canatur, explicó que la situación impactó al transporte, la seguridad y la economía regional.
El transporte interprovincial suspendió sus servicios hacia el sur, lo que aisló por completo a regiones clave para el turismo nacional e internacional.
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Los bloqueos paralizaron rutas esenciales para turistas que planeaban viajar por tierra. Algunos buses sufrieron ataques durante su recorrido. Esa situación generó temor entre viajeros nacionales y extranjeros. Loayza indicó que los bloqueos afectan turismo peruano de manera directa y prolongada.
Este problema se originó por protestas de mineros informales que exigen cambios legales y respuestas políticas. La protesta escaló rápidamente y provocó cortes totales en carreteras estratégicas.
Bloqueos de vías por mineros en el sur dañan imagen del país y el impacto no se limita al transporte.
Hoteles, agencias de viajes, restaurantes y guías turísticos perdieron ingresos durante estos días. Las cancelaciones rompieron cadenas de reservas ya confirmadas. Muchas empresas pequeñas vieron en riesgo su sostenibilidad para los próximos meses.
Los bloqueos también provocaron daños a infraestructuras utilizadas por los visitantes. Eso generó más incertidumbre para los operadores turísticos.
Carlos Loayza advirtió que la situación daña la reputación del Perú como destino seguro. La percepción de inestabilidad ahuyenta a turistas internacionales y aleja posibles inversiones. El gerente de Canatur consideró que la falta de diálogo agrava la crisis.
La incertidumbre frena las decisiones de agencias y operadores en el extranjero. Sin rutas seguras ni garantías de estabilidad, los turistas optan por cambiar de destino.
El sector enfrenta pérdidas millonarias que aún no logran calcularse con precisión. Regiones como Puno y La Libertad también sufren las consecuencias del conflicto. Los operadores turísticos cancelaron itinerarios y reembolsaron pagos.
Este clima de tensión podría afectar la próxima temporada alta. Las cancelaciones ya marcan una tendencia preocupante para el segundo semestre del año. La recuperación del sector turístico tomará tiempo si persisten los bloqueos. Los destinos más visitados del país dependen del flujo constante de viajeros.
La coordinación entre actores políticos, operadores y comunidades resultará clave para salir de esta crisis. Sin medidas concretas, el turismo continuará perdiendo terreno frente a otros destinos de la región.