Ya avanzada la noche, tirada en la cama mirando televisión (ruido plomo en la pantalla), miro mi celular: no hay señal, tampoco internet, solo un mensaje de llamada perdida de Alfredo. Salgo a la puerta de la calle pensando encontrarlo. Veo a gente en...
Salí de casa, con la premura de un columnista al acecho de su próxima entrega, bebiendo café y dando un mordisco apresurado al pan huaro con mantequilla. Tras un adiós fugaz a mi madre, sin detenerme a escuchar sus entusiastas palabras, me lancé a...